Hace algún tiempo creía que existía una especie de sabio que todo lo dictaba. Él se encargaba de decir que era raro, que era feo o hermoso, que era importante y que no lo era, él lo decía todo, y todo era como él decía.
De tal forma esto era tan aceptable como que uno mas uno son dos. Todo el mundo veía igual, todos clasificábamos las cosas de la misma forma, y el que se opusiese era un loco, un extraño, un ignorante. Bien, después de muchas contradicciones que he encontrado en el mundo me he dado cuenta de que no existe ningún sabio que todo lo etiquete, ni siquiera existe un algo que diga como son las cosas. No tengo ni idea de donde salen entonces esas calificaciones comunes, solo sé que no hay algo que las haga de esa forma, yo he aprendido a ver las cosas totalmente opuestas al resto de gente, he visto a una mujer fea hermosa, a un tipo raro agradable, un acto de bondad como una crueldad cualquiera. Solo quiero deciros que si hay alguien que merece el respeto de decidir que le gusta y le disgusta, sois vosotros mismos, no seáis estúpidos, no os dejéis llevar.
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